San Francisco De Asís 

 

    Desde los inicios de la hermandad existían lazos de unión muy fuertes entre los fundadores y el Monasterio de Santa María de la Rábida que rige la Orden Franciscana, de hecho, entre otras peculiaridades, el predicador de los Quinarios en honor de Nuestro Padre Jesús del Calvario suele ser un sacerdote de dicha orden. Pues bien, en el año 1992, mas concretamente el 19 de junio, llegó a la secretaría de la hermandad la CARTA DE HERMANDAD que la comunidad franciscana le otorgó a nuestra corporación en fecha de 12 de abril de 1.992.

    En un principio la intención de la Junta de Gobierno en aquel entonces es que el Templo de Nuestro Padre Jesús del Calvario fuera regido por dicha orden, pero ante la escasez de frailes en el Convento Palermo fue imposible, lo que si se acordó fue que siempre que fuera posible se siguiera trayendo a un fraile franciscano para predicar el Quinario.

    Asimismo, en el año 1996, la orden franciscana cede una imagen de San Francisco de Asís que se encontraba en el Convento, dicha imagen fue vista anteriormente por nuestro hermano Francisco Rodríguez Ruciero, quien propuso solicitar a la orden franciscana la cesión de dicha imagen y ante la respuesta afirmativa de la Junta de Gobierno, agilizó los trámites para que dicha imagen recibiera culto en nuestra iglesia, realizándose todos los cuatro de octubre, día de su festividad litúrgica, celebrándose en su honor Santa Misa en latín, durante esa semana la imagen se ubica en el altar mayor presidiendo el Templo de Jesús del Calvario. Ese mismo año, salió por primera y hasta ahora única vez la imagen de San Francisco de Asís, procesionó por las calles de Huelva con motivo del XXV aniversario de la Hermandad, todo fue realizado por los jóvenes de la corporación, sabiamente aconsejados por algunos miembros de la Junta de Gobierno, en especial por el Diputado Mayor de Gobierno y el grupo de Priostía, los jóvenes buscaron financiación por todas partes y junto con un último empujón de la hermandad, San Francisco salió dignísimamente por las calles de Huelva y fue acompañado por la Banda de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Huelva.

    Por último, cada Lunes Santo, el Prior del Monasterio de la Rábida acompaña a su hermandad por las calles de la ciudad de Huelva presidiendo dicha estación penitencial.